Blog de SuConsulta.com

Algunas reflexiones sobre temas frecuentemente presentes en nuestras consultas

¡Aprende a manejar tu timón!

«No le tengo miedo a tormentas porque estoy aprendiendo a navegar mi barco» (Louisa May Alcott).

Compartir:

Ser dueños de nuestros destinos no es tarea sencilla.

Para saber hacia dónde direccionar nuestro barco, debemos aprender antes lecciones profundas sobre el mar, sobre vientos, sobre el clima, sobre cómo enfrentar peligros, amenazas naturales, la estructura misma de nuestro barco, sus funcionamientos y recursos, su estructura, porque será el cuerpo con el que atravesaremos la aventura de embarcarnos, timonear una nave y surcar hacia sitios desconocidos.

Para hacer las cosas bien al menos debemos conocer lecciones básicas de navegación que nos instruyan sobre temas variados, leyes marítimas, las vías de circulación de otros barcos, ecología, cambios climáticos, formas de sobrevivencia, manejo apropiado de recursos técnicos dentro de la nave, etc.

Si no, no llegaremos lejos.

Una de las herramientas más efectivas y básicas para llegar al destino que nos propongamos será saber manejar el timón.

Sin saberlo sería imposible navegar en forma segura.

La vida es como el mar y tú eres el barco...

Necesitas saberlo manejar.

Las mejores herramientas para llegar a buenos puertos están dentro tuyo (el barco).

El mar, por su lado, tiene olas gigantes, momentos de paz, vientos fuertes, a veces huracanados, que pueden destruir tu nave en pedazos, días soleados llenos de relax (como el de la imagen), hay aguas dulces y aguas saladas, animales hermosos, y otros que pueden deshacerte en segundos... hay de todo en el mar... hay de todo en la vida... y todo puede ser posible e inesperado... sorpresas buenas y malas te esperan dentro del mar.

Lo único fijo, estable, y posible de conocer, anticipar y dominar es el barco... si lo cuidas... si lo atiendes... si lo preparas... si le haces "mantenimiento" constante... si actualizas sus partes... si las fortaleces, si las preservas, si les brindas paciencia y atención... no es fácil mantener un barco en buen estado siempre... requiere demasiado esfuerzo de tu parte... pero es lo único que tienes para navegar... cuidarte será una forma de cuidar tu viaje... tu travesía por la vida.

El timón es el dueño de tu recorrido.

A donde tu lo dirijas, ahí irás.

El timón marca tu ruta, tu trayecto.

Y tu eres el único que puede marcar hacia qué lado ir, qué lugares esquivar, qué espacios son peligrosos para ti, cerca de qué barcos te irá bien, y al lado de cuáles te sentirás amenazado y a punto de hundirte.

Tu barco necesita que sepas manejarlo bien.

¿Quieres una vida segura, sana, gozosa, placentera, con metas alcanzadas aunque sea con esfuerzo?

Toma el timón de tu nave... dirige mejor tu viaje... ya sabes que el mar es impredecible, que la vida tiene sorpresas... pero eres dueño de tu barco... prepáralo para las tormentas... y si haces bien la tarea sin duda disfrutarás más los momentos de calma, reposo y sosiego que te esperan luego de circular por duros trayectos.

Recuerda: el mar es como la vida y tú eres el barco... y tu timón irá hacia donde tu lo dirijas... el destino es tuyo.

Ps. Patricia Cabrera Sena
SuConsulta.com - 24 años ofreciendo tratamientos de apoyo psicológico en línea en sesiones de una hora y media por chat escrito. Agradecemos a quienes copien nuestros textos que respeten la autoría y citen la fuente.